Villa cubana de Trinidad mejora imagen de las calles

El programa incluye, además de la pintura de fachas,  la reparación de aleros, el resano de paredes deterioradas y trabajos de carpintería. Trinidad quiere lucir coqueta en su medio milenio; por ello avanza, ahora a un ritmo intenso, el programa para la renovación de la imagen de las arterias más

Los trabajos son financiados por la Oficina del Conservador de la Ciudad y el Valle de los Ingenios.El programa incluye, además de la pintura de fachas,  la reparación de aleros, el resano de paredes deterioradas y trabajos de carpintería.

Trinidad quiere lucir coqueta en su medio milenio; por ello avanza, ahora a un ritmo intenso, el programa para la renovación de la imagen de las arterias más importantes de la villa.

Los trabajos financiados por la Oficina del Conservador de la Ciudad y el Valle de los Ingenios parten de un concepto mucho más abarcador que va más allá de la pintura de la fachada.

Esta rehabilitación, puntualiza Rigoberto Montes de Oca, director de la Empresa de Construcción y Mantenimiento, fuerza que ejecuta las labores, incluye la reparación de aleros, el resano de las paredes deterioradas y otros trabajos de carpintería más complejos.

“Aunque no podemos llegar a todas las calles, en otras se realizaron acciones de envergadura como en Vicente Zuyama, donde de un simple retoque de fachada, tuvimos que pasar a la intervención total de la vivienda”.

Lino Pérez, entre Santana y José Martí fue de las primeras en concluirse, junto a Vicente Zuyama; en fase de terminación están Rosario y Gloria; y se están preparando las fuerzas para llegar en el mes de noviembre a Jesús María y Gutiérrez, las dos arterias más importantes de la ciudad y con un número importante de entidades localizadas en ellas, por lo que resultará imprescindible la colaboración de las administraciones estatales.

Para asegurar la durabilidad de los trabajos y la armonía citadina también se requiere de una alta dosis de disciplina social y evitar comportamientos indolentes que dañen no solo la imagen, sino las arcas de la Oficina del Conservador que destina recursos importantes a estas labores: un litro de pintura, por ejemplo, tiene un costo entre 6 y 8 dólares, mientras la calle Lino Pérez que recibió una reanimación integral generó un gasto de más de 100 mil pesos en moneda total.

Ana Martha Panadés

Texto de Ana Martha Panadés
Reportera de Escambray. Máster en Ciencias de la Comunicación. Especializada en temas sociales.

Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *