Cuba no descuida su proyección estratégica

Alejandro Gil Fernández, viceprimer ministro cubano
y titular de Economía y Planificación, afirmó que además de atender a las urgencias diarias, Cuba no descuida su proyección estratégica, y avanzará considerablemente este año en el diseño y la conclusión de trabajos del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030.

En el espacio televisivo de la Mesa Redonda, expresó que parte de ello es el ordenamiento monetario del país, tarea de gran envergadura que se encuentra en fase avanzada de estudio y que genera un entorno monetario y financiero más favorable para que tengan éxito las transformaciones que se están diseñando.

Sobre la frase expresada por el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, “Nos tiraron a matar y estamos vivos”, expresó que esto significa que se ha resistido, que los cubanos no se conforman solo con resistir sino con continuar desarrollando el país y en base a ello se ha organizado el trabajo para 2020.

Para nada hemos descuidado la proyección estratégica del país, tenemos que hacer un esfuerzo adicional, sobreponernos día a día a las presiones del bloqueo, a las urgencias de la economía y seguir avanzando, expresó Gil Fernández.

Acotó que en el actual calendario se alcanzarán seguramente las metas propuestas y para ello resulta imprescindible el trabajo unido de todos los actores económicos.

Será un año duro, tenso, de cambios importantes para la economía del país, pero a su vez será un año de éxito, enfatizó.

El viceprimer ministro sentenció que 2020 debe ser un año de profundas transformaciones en la forma de gestión de la empresa estatal, para lo cual el pasado año se dieron los primero pasos.

Tenemos que empezar a evaluar el vínculo del sector empresarial estatal con el Plan de la Economía, dijo, a la vez que aseveró que el país está en condiciones de avanzar en ese sentido, de buscar una mayor flexibilidad, un plan menos detallista, menos asignativo, y de que exista una mayor autogestión de las entidades en la búsqueda de solución y alternativas a sus demandas.

Ya disminuimos los indicadores directivos que emitimos y los del encargo estatal, pero hay que correr riesgos, explicó.

Expresó que es necesario crear las condiciones para que los empresarios puedan expresar su talento, aunque reconoció que algunos de ellos no aprovechan al máximo las oportunidades de las medidas aprobadas en su beneficio.

Estratégicamente, en lo que es la gestión de la empresa estatal socialista y el desarrollo local, tenemos que alcanzar una transformación importante de fondo en el transcurso de 2020, comentó.

Sobre el Plan de la Economía aprobado, dijo que ya se discute en los centros de trabajo en busca de reservas, y que si bien este sistema ha dado resultados hay que seguir avanzando de manera gradual; que las reuniones no sean para ver qué falta, sino para evaluar cómo cumplir lo que se pide con lo asignado, e incluso, hacer un poco más.

Llamó a mantener los niveles de ahorro, utilizando más eficientemente los recursos, al tiempo que se incrementan y diversifican las exportaciones, y asegurar el cobro de estas.

El titular expresó que esta es la única fuente real y genuina de divisas que tiene la economía, por lo que se ha hecho énfasis en aumentarlas, tanto las de rubros tradicionales como el tabaco o el níquel como otras que se van consolidando.

Para 2020 estamos previendo un crecimiento de las exportaciones de un  3,7 por ciento, pero esto es solo en papeles, hay que lograrlo ahora en físico, sentenció Gil Fernández.