Expertos de Cuba afirman que no hay evidencia científica de “ataques sónicos” en La Habana

La Academia de Ciencias de Cuba presentó un informe técnico con una evaluación de los incidentes de salud ocurridos durante estancias en La Habana de empleados de gobiernos extranjeros y sus familias

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Doctor Mitchell Valdés-Sosa, director general del Centro de Neurociencias de Cuba. (Foto: ACN)

Expertos de la Academia de Ciencias de Cuba (ACC) presentaron este 13 de septiembre, en La Habana, un informe técnico en el que evaluaron los incidentes de salud ocurridos durante estancias en La Habana de empleados de gobiernos extranjeros y sus familias.

En conferencia de prensa el doctor Mitchell Valdés-Sosa, director general del Centro de Neurociencias de Cuba (CNEURO) y responsable del Comité de expertos, explicó que tras cinco años de aquellos sucesos continúan sin explicación aceptable los incidentes de salud no identificados de diplomáticos norteamericanos.

Mientras, se multiplican reportes de este tipo en países como Austria, Alemania, Vietnam y el propio Estados Unidos, y la prensa internacional continúa divulgando con intensidad explicaciones no basadas en la ciencia que confunden al público, acotó.

Señaló además, que esto sigue siendo un obstáculo al normal desenvolvimiento de las relaciones entre Cuba y el gobierno estadounidense.

Valdés-Sosa expresó que la evaluación presentada hoy constituye el primer documento donde de forma exhaustiva los investigadores cubanos examinan todas las aristas de esa cuestión, a partir del análisis de toda la información publicada al respecto y una estrecha consulta con científicos extranjeros, así como del acceso al informe policial del Ministerio del Interior.

Según consta en el texto, la falsa narrativa construida en torno a lo que llamaron «síndrome misterioso» asume que la causa de esos acontecimientos son ataques con algún arma de energía no identificada, y se basa en seis supuestos -no verificados- que los expertos cubanos pudieron desmontar uno por uno.

En este informe examinamos críticamente la plausibilidad de estas afirmaciones y las pruebas en las que se basan y concluimos que la narrativa del «síndrome misterioso» no es científicamente aceptable en ninguno de sus componentes y que solo ha sobrevivido debido a un uso sesgado de la ciencia, afirmaron los estudiosos.

Las evidencias apuntan, de acuerdo con los investigadores, a que posiblemente algunos empleados estadounidenses mientras estaban ubicados en La Habana se sintieron enfermos debido a una colección heterogénea de condiciones médicas, algunas preexistentes antes de ir a Cuba y otras adquiridas debido a causas sencillas o bien conocidas.

Muchas enfermedades prevalentes en la población general pueden explicar la mayoría de los síntomas, por lo tanto, no existe un síndrome novedoso, y sólo una minoría de personas presenta una disfunción cerebral detectable, la mayoría debido a experiencias anteriores a su estancia en La Habana y otras debido a condiciones médicas bien conocidas, aseguraron.

Añadieron que ninguna forma de energía conocida puede causar selectivamente daños cerebrales (con una precisión espacial similar a un haz de láser) en las condiciones descritas en aquellos hechos, y aunque hay armas que utilizan sonido o microondas son de gran tamaño y no hay posibilidad de que pasen inadvertidas.

Ni la policía cubana, ni el FBI (Buró Federal de Investigaciones), ni la Real Policía Montada de Canadá han descubierto pruebas de ataques a diplomáticos en La Habana, a pesar de las intensas investigaciones, subrayaron en el informe.

Destacaron que las explicaciones psicogénicas y tóxicas para muchos síntomas en algunos casos fueron rechazadas para una investigación adecuada, a pesar de que todas las condiciones para la propagación psicógena del malestar estaban presentes en ese episodio, incluyendo una probable respuesta médica inicial inadecuada, el temprano respaldo del gobierno estadounidense a esa teoría y la cobertura sensacionalista.

El doctor Valdés-Sosa, en representación del grupo de expertos, reafirmó la disposición de la ACC para revisar estas conclusiones si surgen nuevas pruebas, e invitó a refutar estas interpretaciones en un clima de colaboración científica abierta.

No obstante, insistió en que esa institución rechaza firmemente como «verdad establecida» una narrativa construida sin bases científicas reales.

A su vez, dijo que lamentan la falta de información médica adecuada sobre los pacientes para llevar a cabo este trabajo y las restricciones artificiales impuestas a la colaboración con los investigadores estadounidenses que participaron en las evaluaciones de los implicados.

Nos solidarizamos con la situación de los diplomáticos estadounidenses, o sus familiares, que tienen problemas de salud, dado que reconocemos que hay personas que se han sentido enfermas, y creemos que es éticamente imperativo disipar las teorías conspirativas descabelladas y la atribución errónea de los síntomas a explicaciones que desafían las leyes de la física, agregó el directivo de CNEURO.

Por otra parte, reiteró que lograr el objetivo de cooperación y colaboración entre investigadores estadounidenses y cubanos sería un paso sólido para acelerar la recuperación de los afectados por estos incidentes.

El 17 de febrero de 2017, la Embajada de Estados Unidos en La Habana comunicó al Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba que cuatro de sus diplomáticos y una esposa habían sufrido «ataques sónicos», y entre esa fecha y el primero de septiembre de 2017, un total de 15 casos se habían acumulado y se reportó uno más en 2018.

Los supuestos ataques acústicos sirvieron de pretexto al gobierno de Washington para acusar a Cuba como agresora, sin evidencia alguna de los hechos, en qué circunstancias ocurrieron y menos aún de la participación cubana.

A ello se sumó que el gobierno de Donald Trump impidió de manera reiterada que la comunidad científica especializada de ambos países discutiera los temas sobre bases científicas, se accediera por Cuba al examen de los pacientes o sus historias.

Agencia Cubana de Noticias

Texto de Agencia Cubana de Noticias

Comentario

  1. Los sucesos sonicos en la embajada de EU en Cuba. Un pretexto de EU?
    Los norteamericanos han aprendido de sobra a INVENTAR PRETEXTOS para entorpecer determinadas situaciones cuando no les convienen. Han sucedido por todo el mundo como las armas de destrucción masivas de Irak, o en su propio territorio con la autoagresion a las torres gemelas, y en especial con Cuba, estos inventos y pretextos llevan más de 60 años, desde los pilotos que volaron sobre Girón y nunca reconocieron, los aviones con insignias de las F. A. Revolucionaria, la brigada 2506 que invadió por Girón así como las bandas del escambray, todas situaciones organizadas, financiadas y abastecidas con armas norteamericanas , las presiones a terceros países para romper relaciones con Cuba, la creación de una fuerte comunidad contrarevolucionaria en Miami, la realización de acciones encubiertas de sabotajes como la voladura del avión o contra la economía utilizando a terceros y una infinidad de acciones subversivas difíciles de mencionar en estos años de revolución que han convertido a Cuba en un país agredido y víctima del terrorismo más que un país terrorista como ellos dicen, y otros muchos sucesos en los cuales EU ha intentado mantenerse al margen o no aparecer como responsable. Quien duda entonces? que con estas situaciones anteriores, la influencia sistemática de la CIA para acabar con Cuba, la intención de sectores de la Comunidad de Miami y los análisis realizados por la parte cubana con seriedad en este caso demostrando que no existían esos ataques sonicos que, ESTA HALLA SIDO OTRA INVENCIÓN O PRETEXTO de la parte norteamericanos para obstaculizar las relaciones que avanzaban con Obama? Está claro que el reconocimiento de Obama en el sentido de que el bloqueo no había surtido efecto, puso en ridículo a grupos muy fuertes de poder en EU que no le perdonaron eso ni los esfuerzos durante más de 60 años para destruir a Cuba, perdidos con este reconocimiento, como se le explicaría a los que reclaman cosas en Cuba?, de ahí considero, que la misión dada a la CIA fue buscar un pretexto que se encontró utilizando a supuestos enfermos en los funcionarios de la embajada de EU en Cuba en los momentos en que se alcanzaba ese punto en las relaciones. De lo demás en el sentido de darle forma a los sucesos sonicos se encargaron los plumíferos del dolar. Por eso concluyó que nunca encontrarán nada más que otro de los inventos de ese macabro país del mal.

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