Sur del Jíbaro apuesta al cultivo del garbanzo

El municipio espirituano de La Sierpe fomenta la plantación de esta legumbre con lo cual sustituye costosas importaciones

La extensión del cultivo del garbanzo a áreas agrícolas de la región central del país figura entre las estrategias que aplica la Estación Territorial de Investigaciones de Granos (ETIG) Sur del Jíbaro, de La Sierpe, para diversificar las producciones de granos del programa de autoabastecimiento alimentario territorial y sustituir importaciones.

El municipio incursiona este año en la producción de la mencionada legumbre y ya dispone de las semillas registradas de cuatro variedades, algunas de ellas todavía en proceso de evaluación por parte de la propia institución, con vistas a completar su siembra en la actual campaña de frio en la granja de cultivos varios Chorrera de la Unidad Empresarial de Base Natividad.

El investigador Jorge García de la Osa, al frente del programa de extensionismo de los granos en la ETIG Sur del Jibaro, explicó que en los estudios experimentales sobre el cultivo del garbanzo se comprobó su tolerancia a las condiciones de sequía, entre las susceptibilidades de la mayor parte de las áreas productivas del territorio por la carencia de sistemas de riego.  

Significó la capacidad de estas variedades para aprovechar la humedad residual de las lluvias; y aclaró que son resistentes al Tris, plaga que ataca fuertemente al frijol: “Estamos convencidos de que se pueden lograr buenos rendimientos con solo la aplicación foliar de fertilizantes biológicos, entre las principales bondades”, dijo.

Agregó que, en este territorio espirituano, con una manifiesta cultura monoproductiva del arroz, resultó necesario reforzar la capacitación a los productores con la finalidad de extender de manera progresiva la siembra del garbanzo, del cual se podrán obtener significativos aportes productivos y económicos, si se cumplen a pie de surco con los requerimientos tecnológicos.

La siembra de las áreas durante la época óptima que se enmarca entre el 15 de noviembre hasta el 30 del propio mes se considera esencial, acotó García de la Osa, quien recomienda apoyar con un riego de agua en la etapa de floración y llenado del grano.

Nicolás Hernández González

Texto de Nicolás Hernández González

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