Enseñar con el alma y el corazón (+video)

Luego de 40 años en la Enseñanza Especial, Ana Clara Montesino asegura que su vida no estaría completa si le faltaran los alumnos

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“Nunca me doy por vencida cuando me enfrento a un nuevo caso», asegura la educadora. (Foto: Xiomara Alsina / Escambray)

“Maestra, yo solo quiero aprender Matemática, hoy no me enseñes Lengua Española ni de El Mundo en que Vivimos, hoy vamos a contar. Mira, ya cuento hasta el 100 y puedo sumar y restar también”. Así de caprichosa se presenta Breisy, la niña de nueve años que nació polimalformada y desde entonces lucha por vivir de la mejor manera posible, en un hogar humilde pero lleno de amor y ternura, ubicado en el poblado de Iguará.

Sus ojos negros y la carita de pícara dan fe de que cada reclamo será cumplido por la maestra de apoyo y máster en Defectología, Ana Clara Montesino Rodríguez, quien lleva 40 años vinculada a la Enseñanza Especial, en Yaguajay.

“Yo viajo a diario desde Las Minas, donde vivo, hasta distintos puntos del municipio —refiere la educadora—, porque atiendo a 21 estudiantes con limitaciones físico-motoras u otras patologías, los cuales se encuentran en diferentes niveles de enseñanza: Primaria, Técnica y Profesional y Preuniversitaria”.

¿Cómo lo logras?

“No se trata de una actividad fácil, a mí me gusta trabajar con niños que presentan discapacidad intelectual porque ellos necesitan mucho afecto, son disciplinados y se esfuerzan para aprender, se muestran laboriosos, educados y luchan por seguir adelante, pese a sus limitaciones”.

De un lado al otro del municipio Ana Clara pasa la semana. En el seminternado Héroe de Yaguajay, de Meneses, tiene ocho alumnos y en la escuela Felipe Rodríguez, otros tres que se forman como dulceros o ayudantes de elaboración. Pero también asesora el desempeño de los que estudian en el centro mixto Ignacio Agramonte y en el seminternado Francisco Vale, situados al norte de la provincia.

“Entre mis múltiples deberes está la orientación para el desarrollo de las pruebas de ingreso y otras acciones educativas especiales para que los adolescentes con limitaciones logren su ingreso a la universidad, así ha sido por años, hoy tengo casos que ya son médicos o se desempeñan en otras profesiones”, dice con orgullo esta educadora.

¿Qué dejas para la familia?

“Todo, a veces no sé cómo puedo cumplir con cada una de mis responsabilidades, tengo dos hijos y tres nietos que gracias a la ayuda de mi hermana pude criar y educar bien, ahora enfrento otros problemas, como el de la construcción de mi casa que fue afectada por el huracán Irma, aunque, por suerte, me dieron los materiales para hacerla”.

¿Hasta qué punto logras trasmitir tus enseñanzas?

“Nunca me doy por vencida cuando me enfrento a un nuevo caso con marcadas limitaciones, incluso, con trastornos en la personalidad, algunos son considerados casos sociales severos. Lo primero que hago es situarme en el lugar del niño, vivir lo que vive, sentir lo que siente, solo así puedo ganar su confianza, su cariño. Luego viene lo de la enseñanza, yo paso junto a ellos varias horas y hago lo que quieran, es decir, no les impongo nada, solo me dejo llevar por sus caprichos.

“Con Breisy sucede muy a menudo, a ella la visito dos veces por semana para darle clases en su hogar, a veces llego y no quiere levantarse, entonces la mimo, me pongo a jugar hasta que me pide incorporarse, estos casos no se pueden presionar para que aprendan, por eso se les reajusta el programa de estudio con las asignaturas y los contenidos que puedan asimilar”.

Casi al término de su edad laboral Ana Clara asegura que su vida no estaría completa si le faltaran los alumnos, a quienes complace y guía de una manera muy peculiar como si lo hiciera con el alma y el corazón, al verla en su continuo transitar desde Las Minas hasta Centeno, Meneses, Iguará, Yaguajay o cualquier otro poblado del territorio, me imagino cuántas vicisitudes debe enfrentar para llegar  a tiempo a las escuelas o las casas donde la esperan sus niños, los cuales se mantienen ajenos a esta realidad, solo así se puede definir tanta entrega, sacrificio y amor por enseñar.

Xiomara Alsina

Texto de Xiomara Alsina
Reportera de Escambray por más de dos décadas. Especializada en temas socioeconómicos.

Comentario

  1. Gracias a dios existen personas en este mundo con ese corazón
    Dios la bendiga

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