Trinidad: el mare mágnum de la Candonga

El Área Comercial divide opiniones en el Centro Histórico de Trinidad. Criticado por unos, defendido por otros, el espacio pende como una espada de Damocles sobre la imagen de la ciudad. Escambray accede a los instrumentos legales.   Trinidad de Cuba: Entre el bolsillo y la salvaguarda (Carlos Luis Sotolongo

El Área Comercial cuenta con 188 cuentapropistas. El Área Comercial divide opiniones en el Centro Histórico de Trinidad. Criticado por unos, defendido por otros, el espacio pende como una espada de Damocles sobre la imagen de la ciudad. Escambray accede a los instrumentos legales.

 

Trinidad de Cuba: Entre el bolsillo y la salvaguarda

(Carlos Luis Sotolongo Puig y Mairelys Valdivia Díaz, estudiantes de periodismo)

Mientras hostales y paladares transfiguran el patrimonio edificado de Trinidad, la actividad por cuenta propia en espacios públicos del Centro Histórico también mantiene el vilo a los especialistas, preocupados por la imagen de la ciudad.

Cada día se agolpan en las mesas institucionales mayor número de insatisfacciones respecto a la candonga, ubicada en el parque Las Tres Palmitas, la calle Cañada y el callejón de Media Luna.

De un lado se escuchan las quejas de los vecinos, principales perjudicados de los más de 50 puntos de ventas erigidos en la zona, no solo porque obstruyen el paso y restringen la recogida de basura solo a los lunes, día de descanso para los cuentapropistas, sino por las indisciplinas provocadas; del otro extremo, los directivos, que reconocen que el asunto se les ha ido de las manos y aunque las alternativas están plasmadas en tinta, sufren la epidemia del stand by.

Del proyecto Feria de artesanos en vivo, concebido para una expo-venta de artesanía genuina del terruño, solo queda una banderola confinada a un rincón de la Oficina del Conservador de la Ciudad de Trinidad y el Valle de los Ingenios.

Antes de la irrupción del cuentapropismo, la zona llevaba sobre sus hombros la cruz del deterioro, provocado por la acumulación de mesas para la comercialización.

A sabiendas de la inminente avalancha y a instancias del Plan Maestro de la Oficina se realizó un diagnóstico, previo a la apertura de 2010, para evaluar el fenómeno. Se corroboró la urgencia de frenar el otorgamiento de licencias para ese espacio; sin embargo, de un pestañazo el sitio trasmutó en un mare mágnum de carpas con techo de lona. Quien logre andar por el estrecho trillo que dejan las armazones sembradas a ambos lados de la calle, podrá experimentar un déjà vu al ver productos similares en todas las mesas.

Considerar artesanía como todo objeto de fácil reproducción pone en peligro la salvaguarda del patrimonio inmaterial de la villa, ya que lejos de percibir piezas con buena terminación, exponentes del caudal de tradiciones artesanales de la ciudad, se advierte un arte estereotipado, reproductivo y limitado a la mulata recostada al almendrón o a burdas reproducciones de obras paradigmáticas de la plástica cubana como Campesinos felices, de Eduardo Abela, o La jungla, de Wifredo Lam. ¿Dónde queda la especialización? ¿Qué hacer?

María Escobar Brunet, directora de la Dirección Municipal de Trabajo.“Estamos conscientes del hacinamiento del área -reconoce María Escobar Brunet, directora de la Dirección Municipal de Trabajo (DMT)-. Hemos laborado de conjunto con Planificación Física y la Oficina del Conservador para darle una renovación de imagen al Área Comercial, tanto de Las Tres Palmitas como la de Manaca Iznaga. Falta el sitio para ubicarlos”.

Pero la Oficina advirtió sobre la aglomeración…, señala Escambray.

“El análisis no puede ser de un solo lado. No se trata de un capricho, de ubicar a las personas ahí porque sí -agrega Brunet Escobar-. Antes, los puestos de venta tenían hasta seis metros; luego se redujo. Entonces se incorporaron familias enteras a la actividad. Por eso hay tanto hacinamiento, pero también es importante decir que no ha habido aumento. Al principio cada organismo actuaba por separado, hoy trabajamos de conjunto para acorralar el problema”.

EL ARTESANO, ¿UN PROMOTOR CULTURAL?

Para Blanca Pérez Bravo, directora técnica de la Oficina del Conservador, la dificultad no está en la ubicación, sino en el número de afiliados a la actividad.

“En su momento se escogió el parque Las Tres Palmitas previo acuerdo con los artesanos. Hoy ese espacio pertenece a la DMT. El Centro Histórico no tiene dónde asumir la actividad. Hemos estudiado e intentamos dar una solución desde el punto de vista urbano, pero no se llega a un acuerdo. Nadie puede tildar a la Oficina de poner trabas a la actividad por cuenta propia”, refiere.

Todavía no se avizora una solución palpable. Según la directora de la DMT el estudio compete a Planificación Física. Ellos analizan y proponen las áreas al Consejo de la Administración, quien las aprueba.

Desde la perspectiva metodológica todo está escrito. Las Ordenanzas Urbanas recogen aspectos referidos a la estética, la disciplina, el comportamiento; pero lo legislado cae en el vacío. Continúan las insubordinaciones, los juegos de dominó en la candonga y algún grito interrumpe la siesta de los vecinos.

Por eso Pérez Bravo recuerda que “un artesano es también un promotor cultural por excelencia. Además de vender un producto, ellos trasmiten a los visitantes la idiosincrasia del trinitario. Hoy se proyecta una imagen deplorable en el lugar, el mobiliario y la conducta”.

¿Por qué no se han aplicado estas regulaciones con el rigor requerido?

La actividad por cuenta propia también mantiene el vilo a los especialistas. “Se necesita un punto donde concuerden responsables y artesanos. No es por falta de aprobación de ningún tipo. Falta exigencia de hacer valer lo normado”, sostiene.

En medio del agrisado panorama salta la voz de Ybrahim del Pozo Placencia, subdirector de empleo de la DMT, quien refiere cómo esta actividad ha mejorado las condiciones de vida y ha garantizado la reinserción de desvinculados.

A pesar de la marisma, queda clara la renovación estética como tema apremiante. Aunque el diseño del mobiliario y el vestuario está hecho, otras prioridades aplazan la puesta en marcha de la iniciativa. De modo que los vecinos intentarán sobrevivir a las jornadas, mientras este asunto pende sobre la imagen del Centro Histórico de la villa.

RESPALDO PARA INTERVENIR

La detección de una ilegalidad, ya sea en hostales, paladares o en la propia Candonga, inicia las divergencias entre particulares y entidades estatales. Si bien algunos organismos tienen un cuerpo legal diseñado para aplicar sanciones, otros poseen pocas herramientas para actuar. Quienes saben de este desbalance de poderes lo utilizan a su favor.

En el caso de los hostales, la Dirección Municipal de la Vivienda (DMV) debe lidiar con quienes mantienen la postura de “la multa no me preocupa: la pago y ya”, sin conocer que el cuerpo de inspectores puede aplicar medidas severas como variantes de demolición, reestructuración y el retiro de la licencia. Por su parte la DMT ha suspendido el ejercicio a cafeterías, puntos de ventas y otras actividades menores.

Mientras ambas instituciones hacen uso de su andamiaje jurídico, la Oficina del Conservador debe valerse de intermediarios para aleccionar. Ello, además de interferir en la labor de salvaguarda, le resta potestad frente a los infractores.

“Esa es una de las principales dificultades que enfrentamos. Al no contar con un respaldo de la ley para asumir determinadas posturas, aplicamos estrategias para apelar a la conciencia de la gente y a veces no da resultado”, señala Blanca Pérez Bravo.

Considerar la Ley General de la Vivienda como principal sustento para la labor de la Oficina deviene obstáculo. Salvo algunas decisiones, amparadas por el Consejo de la Administración para asumir posturas respecto a casos puntuales, dicha ley es única en todo el país.

En teoría, se trata de un esfuerzo mancomunado entre los cuerpos de inspección de las distintas partes, pero en la práctica este engranaje no siempre funciona. “No podemos decir que la actividad de inspección del territorio ha sido consecuente con la importancia que tiene su labor en el Centro Histórico, creo que hoy está por debajo de lo que pudiera reportar”, concluye la especialista.

Redacción Escambray

Texto de Redacción Escambray

Comentario

  1. REALMENTE LO ESENCIAL NO ES DESTRUIR LA CANDONGA….ESE TIPO DE MERCADO TIENE ATRACTIVOS INNEGABLES PARA LOS TURISTAS….LA ESENCIA DE LA CUESTIÓN ES DEFINIR TÉRMINOS: QUÉ SE VENDE Y QUE NO SE VENDE EN LA CANDONGA: LA PRODUCCIÓN CUASI SERIADA DE SOUVENIRS PUEDE SUBSISTIR SI NO SE PONEN AL LADO DE LAS MARACAS MÁS BARATAS POR DOCENA, AQUELLOS ARTÍCULOS QUE SON REALMENTE PORTADORES DE VALORES NO SOLO TRADICIONALES, SINO DE GRAN DISEÑO, CON UN REPERTORIO FORMAL QUE, SIN NEGAR LA TRADICIÓN, SE LANCE AL VUELO ARTÍSTICO CONTEMPORÁNEO….LA PROPIA TIENDA DEL FBC DE TRINIDAD ES COMO UNA CANDONGA REFINADA, SIN QUE NADIE SE OFENDA…..MIENTRAS, EN LOS SALONES DE ARTESANÍA SALTA A LA VISTA QUE LA CALIDAD DE LA LENCERÍA EN RANDA SIGUE SIENDO REVITALIZADA SIEMPRE, MIENTRAS ES POBRE EL CROCHET, TAN DEMOCRATICO, TAN DE TODO EL MUNDO EN TIEMPOS PASADOS…..O EL YAREY, AUNQUE NO QUIERO ENTRAR EN EL YAREY PORQUE PARECE QUE LA MATERIA PRIMA ESTÁ ESCASEANDO,…ALGO DE LA ALFARERÍA SE RENUEVA, MIENTRAS OTRA SE QUEDA ATRÁS Y NO PRECISAMENTE EN LOS MODELOS QUE FUERON TÍPICOS EN EL PASADO, SINO COPIAS AL INFINITO DE MODELOS FORÁNEOS….LA VERDADERA ARTESANÍA, LLENA DE VALORES ESTÉTICOS PERDURABLES, MERECERÍA EN TRINIDAD UN ESPACIO DE PRIVILEGIO, UN LUGAR DE LEGITIMACIÓN DE LO MEJOR, DONDE, ADEMÁS, SE IMPARTAN TALLERES PARA TRASMITIR CONOCIMIENTOS Y REVIVIR LAS MANIFESTACÍONES PERDIDAS…LA MALLA SE PERDIÓ, Y NO PUEDO CREER QUE SEA PORQUE SE RELACIONABA CON LAS MANTILLAS PARA IR A LA IGLESIA…LA MALLA ES TAN FACIL DE HACER QUE TODOS LOS PESCADORES LA TEJEN, YA QUE ES LA PARIENTA MINÚSCULA DE LA ATARRAYA….CON BUEN DISEÑO SE PUEDEN HACER NUEVAS APLICACIONES DE ESTE TEJIDO, COMO PUNTAS, ENTREDOSES, CHALES, ESTOLAS, BUFANDAS, ETC…EN CORDEL QUE LUEGO PUEDE SER TEÑIDO….NO SE TRATA DE LLEVAR DISEÑADORES DE LA HABANA QUE USEN COMO MAQUILADORAS A LAS ARTESANAS TRINITARIAS….SINO DE LLEVARLE A LOS TRINITARIOS CLASES DE SUPERACIÓN PARA QUE SE ARMEN DE UN REPERTORIO FORMAL CONTEMPORÁNEO Y SUSTENTABLE……SUSTENTABLE Y ARTÍSTICO, ESA ES LA GRAN META, MIENTRAS SE PUEDE DEJAR QUE ,DE SAN ANTONIO A MAISI, SE VENDEN LAS MISMAS TALLAS DE MADERA, LOS MISMOS COLLARES DE SEMILLAS CARACOLES, ETC….TODO PUDIERA CONVIVIR, CON UN POCO DE BUEN GUSTO, INTELIGENCIA Y MENTE ABIERTA….

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