La otrora Colonia Española, majestuosa construcción de la cuarta villa de Cuba

La Colonia –así se lee ahora en su fachada- es desde hace algunos años una tienda y fue nominada en 2008 al Premio Nacional de Restauración

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Vista de la otrora Colonia Española desde el bulevar espirituano. (Foto: Osvaldo Gutiérrez)

La otrora Colonia Española es hoy una de las construcciones más hermosas de esta, ciudad central del país y brinda un aire de majestuosidad al bulevar, lugar donde concurren de manera cotidiana los espirituanos.

Ya sea para realizar determinadas compras, tomar un helado, beber un café o sencillamente sentarse a descansar en uno de los bancos el bulevar, es uno de los sitios preferidos por los habitantes de la añeja urbe, enclavada a unos 350 kilómetros al este de La Habana.

En la esquina de las antiguas calles Real y Camino del Príncipe, en la actualidad Independencia y Agramonte, respectivamente, la edificación fue encomendada al reconocido maestro de obras Conrado Garau Gayá, natural de las Islas Baleares, la cual finalizó en 1926.

Parte superior de la Colonia Española.

Este también participó en otros proyectos de la cuarta villa como la remodelación de la Iglesia de la Caridad, la clínica Los Ángeles y la portada del cementerio.

Su nombre lo lleva ahora la Escuela Taller de Oficios, perteneciente a la Oficina del Conservador de la Ciudad de Sancti Spíritus.

De acuerdo con el libro Calle Independencia que fue Real, de los autores María Antonieta Jiménez -Historiadora de la Ciudad- y Javier León, el citado maestro de obras nació en Menorca, en 1895, y su llegada a Sancti Spíritus debió ocurrir alrededor de 1920.

La Sociedad de Instrucción y Recreo Colonia Española era la dueña de aquella joya, resalta el texto.

El volumen recoge una cita del periodista y crítico de arte Manuel Echevarría, ya fallecido, quien señala que ″el transeúnte no puede menos que reparar en la volumetría de gran riqueza ornamental (…) y un frontón de singular belleza con su torre-mirador coronada por sugerentes pináculos″.

″Características que denotan la influencia del neorrenacimiento español en un alarde ecléctico de indudables valores artísticos″, según Echevarría.

La Colonia –así se lee ahora en su fachada- es desde hace algunos años una tienda y fue nominada en 2008 al Premio Nacional de Restauración.

Además de la Iglesia Mayor, el puente sobre el río Yayabo y el Teatro Principal -tres joyas de la arquitectura espirituana- sobresalen la antigua Sociedad El Progreso (hoy sede de la Biblioteca Provincial Rubén Martínez Villena) y el otrora Palacio Valle (Museo de Arte Colonial).

Agencia Prensa Latina

Texto de Agencia Prensa Latina

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