Este sábado se juega de tarde en el “Huelga”

Para este juego el alto mando de los Gallos anunció al zurdo Alex Guerra como abridor

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El Huelga es cuartel general de los Gallos desde 1991. (Foto: Oscar Alfonso/ACN)

Después de varios estira y encoge con el horario de inicio, finalmente el partido entre Gallos y Elefantes en la arrancada de la Serie Nacional de Béisbol en su versión 63 será este sábado a partir de las dos de la tarde en el estadio José Antonio Huelga.

Para este juego el alto mando de los Gallos anunció al zurdo Alex Guerra como abridor. En la campaña 62 el cabaiguanense solo ganó dos juegos y perdió cuatro. Trabajó en 22.2 innings y su efectividad fue discreta al compilar 9.93 PCL con un desbalance en cuanto a ponches y boletos: 7 y 9.

Otro fue su desempeño en la postemporada, cuando le lanzó un juegazo a los Leones en el Latinoamericano y les dejó en solo dos hits y les ganó 10-1, para poner en ese momento el play off a favor de los Gallos 2-1.

Para este primer partido fue anunciada como posible alineación a Rodolexis Moreno (tercera base), Lázaro Fernández (segunda), Yunier Mendoza (primera), Frederich Cepeda (designado), Duniesky Barroso (jardinero derecho), Carlos Gómez (jardinero central), Alejandro Javier Escobar (jardinero izquierdo), Yaidel Guerra Cabello (receptor) y Liuber Gallo (torpedero).

Para el juego del domingo, pactado también para las dos de la tarde, está anunciado por los espirituanos el zurdo Ariel Zerquera.

Según las estadísticas de Wilber Rodríguez, los enfrentamientos históricos entre ambos elencos favorecen a los Gallos con 118 triunfos contra 95 de sus rivales.  

Sobre los horarios vale aclarar que la controversia se formó porque, tras ser informado inicialmente a las dos de la tarde, la dirección provincial de deportes anunció el cambio para las 6:30 p.m., una decisión que encontró detractores, entre ellos, esta reportera, por considerarlo inoportuno y contradictorio en medio de la agudización de los apagones. 

La tarde de este viernes se adoptó otra decisión: volver al horario inicial de las dos de la tarde, que en las circunstancias actuales parece el más lógico teniendo en cuenta la aguda crisis energética que vive el país.

De hecho, la comisión nacional anunció ese propio horario para todos los estadios cubanos.

Aunque no es la primera vez que ocurren estos entuertos, valga la lección de nuevo. Si en el momento en que se valoraron los preparativos para la campaña, incluso hasta en el propio congresillo técnico —y eso fue hace solo unos días—, nada en el horizonte electroenergético nacional “alumbraba” otra situación diferente a la que se vive hoy, entonces desde ahí lo más sensato parecía tomar la decisión de los juegos vespertinos y evitar el corre-corre de última hora.

Además de servir para ubicar a la afición sobre cuándo puede asistir al estadio, las decisiones e informaciones precisas y oportunas sobre los horarios de los juegos inciden en la organización de las trasmisiones radiales y televisivas, las coberturas de prensa y otras cuestiones logísticas.

Que el país haya defendido la realización de su principal espectáculo sociocultural, aún en medio de condiciones complejas en lo económico, lo alimentario y, sobre todo, lo energético, ha sido lo más difícil y desafiante. Organizar un proceso que ocurre de forma similar todos los años y depende de los hombres debía ser menos complicado.

Elsa Ramos

Texto de Elsa Ramos
Premio Nacional de Periodismo Juan Gualberto Gómez por la obra del año (2014, 2018 y 2019). Máster en Ciencias de la Comunicación. Especializada en temas deportivos.

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