La sobrevida de Francis (+fotos)

El espirituano Francis Rodríguez Real ha enfrentado durante 17 años una fibrosis quística, enfermedad hereditaria grave que requiere de seguimiento cercano y multidisciplinario

La estadía de Francis en el Hospital Pediátrico Provincial ha sido casi permanente. (Fotos: Arelys García/Escambray).

“Estamos 21 días aquí y nueve en la casa. Vivimos más en el Hospitalito que en Caja de Agua y agradezco a los doctores Anaisa y Redelio y a todos los que han mantenido con vida a mi hijo desde los 32 días de nacido, prácticamente”. 

Del rostro ajado por las horas de sobresaltos y mal dormir brota el agradecimiento de la madre espirituana Ismaday Real Reyes. Su hijo Francis Rodríguez tiene 17 años y más de la mitad de su vida ha permanecido ingresado en el Hospital Pediátrico Provincial José Martí Pérez. La ciencia y los afectos han hecho que sobreviva todo este tiempo a una fibrosis quística (FQ), enfermedad hereditaria grave que requiere de un seguimiento cercano y multidisciplinario.

DE DIAGNÓSTICOS Y CERTEZAS

Aquellos vómitos y diarreas, aquellas deshidrataciones constantes, aquella hernia abdominal creciendo daban mala espina a Ismaday, quien una madrugada, apenas la claridad dejó ver el terraplén, polvoriento salió caminando los 4 kilómetros que separan a Caja de Agua de Tuinucú, municipio de Taguasco. El diagnóstico médico confirmó, tiempo después, que las corazonadas de madre eran ciertas.

La doctora Anaisa Marín Acosta, especialista de primer grado en Pediatría y hoy jefa del servicio de Respiratorio en el Pediátrico, conoce al dedillo la historia clínica de Francis.

Un equipo multidisciplinario atiende a Francis desde pequeño.

“Lo recibimos aquí cuando era todavía un lactante, bien malito, con una hernia abdominal gigante, que pudimos intervenir quirúrgicamente alrededor de los seis años de edad. Sin embargo, antes hubo que estabilizarle los trastornos digestivos serios que presentaba. Fue una operación muy riesgosa; duró alrededor de cuatro horas, pero no hubo complicación, el riesgo anestésico fue poco y libramos esa batalla, después tocó enfrentar otras no menos difíciles.

“Desde un inicio —prosigue Anaisa— el niño presentaba vómitos, diarreas, deshidratación grave; todo ello asociado a un compromiso nutricional importante, a una desnutrición proteico-energética marcada. Luego, aparecieron los cuadros respiratorios y las sospechas de una fibrosis quística fueron mayores hasta confirmarse el diagnóstico a los dos años de edad. A partir de entonces, los ingresos fueron múltiples por exacerbaciones del padecimiento con cuadros ya no digestivos, sino pulmonares”.

Debido a las condiciones ambientales donde reside el paciente, dígase exposición al polvo y al olor a azufre proveniente de la refinería Sergio Soto, de Cabaiguán, además de las complicaciones propias de la afección, la estadía de Francis en el Pediátrico Provincial ha sido casi permanente durante 17 años.

“Yo vengo de mudá casi siempre para el Hospitalito, porque lo que más el niño aguanta en la casa son nueve días. Vivimos en Caja de Agua, un lugar muy intrincado, muy frío, con mucho polvo del terraplén, y todo eso le hace mucho daño al niño”, afirma la mamá.

“Me dedico al  cuidado de mi hijo exclusivamente, me es imposible trabajar y dependo de lo poquito que mi esposo siembra para poder comer y mantenernos”.

Ismaday Real, la madre de Francis, agradece el esmero con el que ha sido atendido su hijo en el Pediátrico espirituano.

Y dada esa situación, ¿usted ha tramitado su caso con Asistencia Social?, inquiere Escambray.

“Cuando él estaba chiquito me dieron una chequera. Ya no la tengo, hace rato me la retiraron por el tema de los reajustes que se hicieron. Después de eso, he ido al Gobierno con los resúmenes de la historia clínica para que valoren mi caso para que al menos me den una cuota de gas; todavía no me han dado respuesta. No tengo ayuda social de ningún tipo.

“Como te digo esto, te digo lo otro, estoy agradecida a los médicos y enfermeros de este hospital por tener a mi hijo vivo. A él no le han faltado los medicamentos ni un día. Y cuando uno escasea, se buscan variantes; si no hay de un tipo, se busca otro. Esta es mi otra familia”, resalta Ismaday.

SALVAR CON LA MEDICINA Y LOS AFECTOS

En Sancti Spíritus, 11 niños con FQ están incluidos en el Programa Nacional de Atención Integral a pacientes con dicha afección, que según la literatura médica, es una enfermedad genética de herencia autosómica recesiva, es decir, la madre y el padre portan el gen que la causa; pero no la padecen.

Esta enfermedad afecta, principalmente, los pulmones y, en menor medida, páncreas, hígado e intestino; su tratamiento demanda de antibióticos, enzimas y múltiples ingresos por el difícil manejo del padecimiento.

La atención a estos pacientes es multidisciplinaria —señala la doctora Anaisa Marín, al frente de la Comisión Provincial de FQ— y la consulta de seguimiento está conformada por pediatras, gastroenterólogos, nutriólogos, neumólogos, microbiólogos y personal de Enfermería.

“En los últimos años en Cuba —significa— el diagnóstico se hace al bebé al quinto día del nacimiento, a través de la toma de una muestra de sangre obtenida del talón. Dicha prueba contribuye a un diagnóstico más temprano y un mejor pronóstico para los enfermos”.

A pesar de las carencias económicas existentes hoy en el país, estos pacientes disponen de una dieta diferenciada y, el ciento por ciento de los medicamentos que requieren, en su mayoría altamente costosos, se garantizan; aunque ello implique sortear todas las barreras que impone el bloqueo.

A pesar de las carencias económicas existentes hoy en el país, estos pacientes disponen de una dieta diferenciada y, el ciento por ciento de los medicamentos que requieren, en su mayoría altamente costosos,

Durante los últimos días —manifiesta la especialista— se ha hecho difícil, por ejemplo, tener disponible la pancreatina, fármaco esencial para estos niños. Aun así, se han buscado alternativas para no afectar el tratamiento a estos enfermos.

En 17 años, ¿cuántos hilos de sensibilidad habrán tenido que tejerse para mantener con vida a su hijo?, inquiere finalmente Escambray a la madre agradecida de Francis.

“Imagínese, no había acabado de nacer y ya mi hijo estaba ingresado aquí. Son muchos años de lucha con él y mucha generosidad imposible de olvidar. Cuando su operación de la hernia abdominal gigante, la doctora Anaisa estaba de guardia. Ella vino antes de tiempo y se fue al salón con él, y hasta que no terminó, que lo vio respirando y todo bien, no se fue para su casa. Eso no hay dinero que lo pague”.

Arelys García Acosta

Texto de Arelys García Acosta
Máster en Ciencias de la Comunicación. Reportera de Radio Sancti Spíritus. Especializada en temas sociales.

5 comentarios

  1. Luis Herrera Yanes

    Un olvido imperdonable que cometí en la nota anterior de reconocimiento a nuestro sistema de salud cubano, imperfecto pero muy humano y con profesionales, técnicos y trabajadores muy consagrados pese a las limitaciones materiales con que se enfrentan,. Olvidé censurar críticamente la deficiente y nada humana atención por parte del gobierno del municipio y de la provincia a la solución de una vivienda para trasladar a esa familia a vivir en Sancti Spíritus; tramitar hasta la solución una cuota de gas y volver a entregarle la ayuda de la seguridad social. Considero que este tema requiere en segundo trabajo por la reportera de Escambray con obligadas entrevistas a las autoridades gubernamentales correspondientes.

  2. Luis Herrera Yanes

    Una interrogante es obligatoria en este caso: ¿Habría podido esta familia humilde de campo, recibir los servicios, completamente gratuitos en Cuba, durante años y prolongar la vida de este niño hasta los 17 años, si en Cuba existiera un gobierno capitalista, como los que existieron antes de 1959 y que la generación más joven de cubanos no vivieron las miserias de aquella etapa que le costó a Cuba 20 mil asesinatos sólo durante el gobierno de Fulgencio Batista, dato que extraje de la confesión de un candidato a la presidencia de Estados Unidos y posterior? Las grandes limitaciones que afronta el sistema de salud cubano actualmente son consecuencia directa del arreciamiento del bloqueo estadounidense, que se empeña no solo en desintegrarlo el átomos por ser esta una de las obras más humanas y maravillosa de la Revolución cubana, sino que, a partir del relevo al frente del gobierno cubano de Miguel Mario Díaz Canel están exprimiendo al máximo con las medidas del criminal bloqueo con tal de que el pueblo le exija que entregue las banderas de la Revolución, pese a que ellos saben que eso no va a ocurrir. Simplemente el gobierno norteamericano está cometiendo un crimen de lesa humanidad contra el pueblo cubano.

  3. Arístides Torres Laboris

    Pregunto Ha sido demasiado difícil para las autoridades de la provincia en 17 años trasladar a esa familia de Caja de Agua al Rpto Colón, estoy seguro que en esa zona se han entregado varias casas, y si no es así en 17 años no se ha podido construir, para aliviar el sufrimiento del niño y de su familia, muy eficiente la labor médica y muy humana cargada de afecto, cariño y abnegación, pero deja mucho que desear el de las autoridades municipales y provinciales respectivamente, ese es el trabajo de quienes deciden a que ciudadanos proteger para poder decir un día con mucha razón el país no deja a nadie desamparado. Espero este puñado de letras mal organizadas llegue a quién debe.

  4. DEBEN REVIZAR ESTE CASO EN SEGURIDAD SOCIAL Y DARLE DE NUEVO UNA PRESTACIÓN SOCIAL A ESTA FAMILIA ,TODOS LOS DIRECTIVOS PROVINCIALES DEBEN DE CONOCER O DARLE A CONOCER ESTE CASO PARA QUE LE APRUEVEN UN SUSTENTO PORQUE ES ARTO CONOCIDO POR LA CITUACIÓN QUE SE ESTA ATRAVESANDO Y COMO ESTAN LOS PRECIOS Y DIFICIL DE CONCEGUIR TODO LO NECESARIO EN LA VIDA.

  5. trabajadores sociales y gobierno de Santi spiritus, que hay que esperar para ayudar a esa madre con su hijo? y el gas? y entregarle una vivienda al menos en cabaiguan. y la Chequera de esa madre para cuando?

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