En una fría mañana, Bolivia inició este domingo la jornada electoral con la apertura de las mesas de sufragio a primera hora, en las cuales 7,9 millones de votantes elegirán a las nuevas autoridades ejecutivas y legislativas.
Desde muy temprano, recintos de votación en todo el territorio abrieron sus puertas bajo estrictos protocolos de seguridad y con la presencia de jurados comiciales, notarios, delegados de organizaciones políticas y veedores de 19 organismos internacionales.
“Hoy el pueblo boliviano ejerce su derecho democrático al voto, en una jornada que debe caracterizarse por la tranquilidad, la transparencia y el compromiso cívico”, afirmó el presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Oscar Hassenteufel, en su mensaje inaugural, pronunciado en la sede de ese órgano del Estado, donde estuvo Prensa Latina.
Fuentes del Órgano Electoral aseguraron que la jornada comenzó sin incidentes de consideración y destacaron la amplia participación ciudadana registrada desde los primeros momentos.
En el mayor colegio electoral de La Paz, el ubicado en la escuela Justino Aspiazu, en la calle del mismo nombre del céntrico barrio paceño de Sopocachi, esta agencia de noticias comprobó el positivo flujo de electores.
Resaltaba la tranquilidad reinante y la amplia presencia de veedores internacionales, entre ellos los embajadores de Argentina, Brasil, Egipto, México, Venezuela y representantes diplomáticos de Panamá, entre otros.
Según el TSE, son 7,9 millones de ciudadanos los que participan en la votación, cuyo resultado definirá el rumbo político del país para los próximos años, con la elección de 177 autoridades titulares de los órganos Ejecutivo y Legislativo para el periodo 2025-2030.
En el caso del Gobierno, se vota por el presidente y un vicemandatario del Estado Plurinacional, y en el Legislativo se elegirá a 36 senadores, 130 diputados nacionales (con los correspondientes suplentes), y nueve representantes supraestatales.
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