Tras una disminución inicial en 2025, los delitos contra la masa ganadera cubana han registrado un repunte en meses recientes, según análisis del Grupo de Trabajo para la Prevención y Enfrentamiento al Delito, la Corrupción, las Ilegalidades e Indisciplinas Sociales.
Autoridades advirtieron que “hasta que no logremos una tendencia consolidada a la disminución, no podemos hablar ni del delito general ni del delito contraganado, que hay una reducción significativa”.
El fenómeno ocurre en un complejo contexto económico, político y social, y no hay rechazo a este delito, según el diagnóstico presentado.
Investigaciones en seis provincias y diez municipios evidenciaron mayor aplicación de prisión provisional como medida cautelar, pero persisten problemas: “es bajo el esclarecimiento y los campesinos consideran que existe impunidad”, destacó el reporte de Canal Caribe.
En diálogos con más de 900 personas —incluyendo 400 campesinos de todas las formas productivas—, estos manifestaron insatisfacción, inseguridad y dolor ante el robo de animales.
Irregularidades en contrataciones
Paralelamente, se identificaron violaciones en procesos de contratación económica entre el sector estatal y las pymes. Auditorías a 50 000 pequeñas y medianas empresas revelaron fallas en fichas de costos y cumplimiento de encadenamientos productivos.
De acuerdo con la fuente, se detectó que no en todos los casos se realiza un proceso de licitación y faltan evidencias de pliegos con un mínimo tres ofertas para determinar, analizar y seleccionar ofertas más ventajosas en calidad, precios y plazos.
Se enfatizó que las relaciones contractuales estén caracterizadas por la legalidad y la transparencia, subrayando que los contratos deben ser “la hoja de ruta, el camino del negocio” bajo normativas vigentes.
El informe destacó que los encadenamientos productivos “pueden contribuir a una mejor inserción de los actores no estatales en el plan de la economía”.
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