Técnico espirituano de fútbol en la ruta de otro sueño mundialista

Después de que el pasado año consiguiera lo que parecía una quimera —la clasificación de Cuba a la Copa Mundial Sub-20 de Fútbol Chile 2025—, a Yunielys Castillo Carmenate nada le parece imposible.

Por eso ahora mismo está en República Dominicana con la principal selección cubana, en la antesala de lo que hasta ahora ha sido un imposible: un boleto a la fiesta mayor de la Copa Mundial de la FIFA de Estados Unidos, México y Canadá 2026.

Y aunque sabe que es casi una pesadilla, para él “soñar no cuesta”. Así lo confirma desde Santo Domingo, donde se encuentra cumpliendo una base de entrenamiento de cara al inicio de la eliminatoria mundialista.

“La preparación la empezamos desde este lunes con 13 jugadores que ya habían terminado con sus clubes —confirma a Escambray vía WhatsApp—. Hasta el día de hoy todo va bastante bien y trabajando duro”. No está, lo ha dicho, toda la armada, a la espera de que se incorporen quienes deben esperar por cumplir sus compromisos en los diferentes clubes donde están diseminados. Son las exigencias del contrato y que Cuba debe acatar porque depende de esos hombres para encarar el caro sueño de arrancarle un cupo a la difícil zona de Concacaf.

“Para nosotros es muy bueno que se incorporen estos hombres a la selección. Debe ir superándose y como mejor lo hace es con una competencia interna sana y fuerte, en la que el principal ganador es justamente el equipo”, apunta.

Entre los aspirantes al boleto están viejos conocidos, a quienes se le ha plantado bien el equipo cubano, pero el saldo siempre ha sido el mismo al final del camino, como lo dice el hecho de que nunca se ha logrado llegar al máximo evento del fútbol internacional.

“La fortaleza del grupo es la unidad que tenemos y el sueño de crecer día a día y eso es fundamental. En todas las líneas tenemos jugadores interesantes y de mucha calidad, además fogueados en sus ligas, lo que les permite estar activos y en competencia casi todo el tiempo”.

Es consciente, sin embargo, de las debilidades que año tras año no convierten el gol que hace falta o permiten la perforación de la portería antillana, algunas veces con goleadas que aplastan cualquier aspiración.

“La debilidad quizás sea la juventud de muchos jugadores, pero de todas maneras tienen talento y mucha disposición de juego y eso también cuenta a la hora de salir al terreno”, precisa Yunielys.

La complicada ruta clasificatoria inicia para los nuestros el próximo 6 de junio contra Antigua y Barbuda, como visitantes, y el 10 del mismo mes frente a Bermudas, en calidad de anfitriones.

“Esto es paso a paso. Lo que esperamos es avanzar a la siguiente fase. Además del DT, Sancti Spíritus tiene en las filas de la selección a Ismael Morgado, quien lleva dos temporadas en la primera división de la liga nicaragüense y ha participado en ligas de naciones y eliminatorias del Mundial 2026.

Y mientras se concentra en esta pesadilla, Yunielys Castillo, como director de la selección Sub-20, comparte su atención en otra ruta, cuyo primer gran saldo ya lo tiene en las manos desde hace meses cuando logró un boleto impensado en el premundial de México.

“Ya salió el grupo que nos tocaba en el Mundial. Sabemos que es bien difícil, pero estamos preparándonos para este gran evento; desde que clasificamos ya somos ganadores, pero siempre queremos más”, asegura finalmente.