Las Fiestas Sanjuaneras constituyen una de las celebraciones populares más representativas de Trinidad, fijadas en el calendario en el mes de junio como tributo a San Juan y San Pedro. Mantener viva la tradición rebasa cualquier tipo de contingencia, pues deviene compromiso con la salvaguarda del Patrimonio Inmaterial de la ciudad.
Por ello, el espíritu del carnaval, ajustado a los momentos actuales, se deja ver entre líneas en el programa que retoma propuestas apegadas a los orígenes de la festividad con un matiz religioso inicial para convertirse en manifestación popular con el paso del tiempo.
De acuerdo con Aymé Sánchez Durán, especialista en Comunicación de la Dirección Municipal de Cultura y Arte, la festividad se extiende desde el mes de junio hasta los primeros días de julio y tiene su mayor realce este fin de semana con los recorridos de las comparsas por las principales calles de la ciudad y el poblado costero de Casilda.
El Baile de las flores, en la Casa de Cultura Julio Cueva Díaz, marcó el inicio de los festejos y entre las primeras actividades se realizó también el Concurso de disfraces: la Muerte en Cueros, que recorría las calles asustando a los niños, divirtiendo a los grandes. Taita la Lanza y otros graciosos personajes fueron recreados por las más jóvenes generaciones de trinitarios.
La llamada matanza de la culebra es otra de las propuestas que miró a la tradición. Según investigadores locales, constituye herencia de los negros congos que trajeron sus ritos a Trinidad. Regidos por el santo patrón, San Antonio, escenifican la muerte del diablo, simbolizado por la culebra.
Estas propuestas culturales, aseguró Sánchez Durán, se diseñaron con el propósito de atraer al público más joven, encargado de preservar y transmitir este legado cultural. Serán precisamente los más pequeños quienes protagonizarán el carnaval infantil, organizado por el Movimiento de Artistas Aficionados y los Instructores de Arte de la Casa de Cultura, para arrollar por algunas arterias citadinas hasta el Parque Céspedes.
Los fandangos constituyen otra de las propuestas que se retoman a la luz de la festividad tradicional con pasacalles animados por los cantos y toques de las Tonadas Trinitarias en el entorno de la Plaza Mayor y la salida de personajes típicos, mientras el día 29 en el poblado de San Pedro será la Fiesta tradicional en homenaje a ese santo.
Los festejos traen de vuelta, además, los bailes del Guajiro y de la Galleta, donde reina la identidad nacional, en particular, las fiestas campesinas, el danzón y escenas afrocubanas.
La celebración popular se desarrolla a las puertas de la etapa de verano y cuenta con el apoyo del sector no estatal. Los organizadores de las Fiestas Sanjuaneras ponen todo su empeño para garantizar la calidad de las actividades en reconocimiento al pueblo trinitario y a este municipio, sede del acto provincial por el 26 de Julio.
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