Activistas de la Global Sumud Flotilla, que navega hacia Gaza con ayuda humanitaria, denunciaron hoy la campaña de desprestigio por parte del gobierno israelí para etiquetarlos como terroristas y desacreditar la iniciativa.
Desde una de las embarcaciones, el voluntario mexicano Carlos Pérez Osorio aseguró a través de las redes digitales que el gobierno de Israel mantiene acciones intimidatorias, que buscan justificar una agresión mayor y desviar la atención de la crisis humanitaria en Gaza.
Mientras navegaba por el mar Mediterráneo, al sur de Creta, Pérez Osorio confirmó que el gobierno israelí puso en marcha una campaña publicitaria en plataformas digitales en la que vincula a la flotilla con organizaciones terroristas.
«El ministro de seguridad nacional israelí, Ben Gvir, ha propuesto que los voluntarios seamos catalogados como terroristas, aduciendo que no traemos ayuda humanitaria. Esto no es solo un insulto, sino que abre la puerta para acciones como detenciones arbitrarias, cárceles y otros castigos», relató el activista.
La campaña de desprestigio está acompañada de acciones físicas, como la ocurrida en la madrugada del 24 de septiembre, cuando la flotilla reportó que fue blanco de al menos 13 explosiones, ataques con drones, bengalas y el lanzamiento de presuntos productos químicos contra varias embarcaciones en aguas internacionales frente a las costas de Creta .
El propio Pérez Osorio denunció presuntas interferencias en sus comunicaciones, en lo que describe como una «guerra psicológica» .
La relatora especial de las Naciones Unidas para los Territorios Palestinos, Francesca Albanese, alertó sobre estos hechos y exigió «atención internacional inmediata y protección» para los tripulantes .
Frente a las acusaciones israelíes, los miembros de la Flotilla insisten en el carácter pacífico y transparente de su misión, denuncian los intentos intimidatorios por parte de Israel y ratifican que su objetivo es abrir el corredor humanitario y acabar con la hambruna y el asedio a Gaza.
La flotilla, compuesta por 51 barcos con activistas de 45 países, incluida la ambientalista sueca Greta Thunberg, sigue su rumbo con la determinación de «empujar la narrativa real» de solidaridad, frente a lo que perciben como una campaña para encubrir los crímenes en la Franja.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.