Que no es vida lo que llevamos desde hace un tiempo; que con estos calores horrendos y sin servicio eléctrico la mayor parte del día no se puede garantizar ni la comida ni el sueño y que no hacen falta más explicaciones, sino soluciones concretas.
Así se explica, con los ojos llenitos de estrés, el profesor universitario jubilado que dice haber sobrepasado ya la esperanza de vida del cubano, pero aún tiene cosas que hacer en este mundo; la primera, cuidar de su madre nonagenaria; la segunda, vivir. A ella no la puede acostar en las noches sobre el piso, junto a la puerta abierta, para que se ventile un poco, ni le puede inventar fórmulas que sustituyan el pan, ausente casi a diario de la cuota regular normada. El pan que expenden por la libre en el mercado estatal, más caro ahora que semanas atrás, a veces no es posible adquirirlo por falta de dinero. Ni qué decir del que ofertan los vendedores por cuenta propia, presente aun cuando las panaderías habituales permanecen cerradas por falta de harina.
Los argumentos del profesor son los mismos que se escuchan en las conversaciones callejeras sin apenas aguzar el oído. «Esto está duro, duro, y lo peor es que no se le ve el fin», suele decir la gente con el ceño fruncido. Por lo general se ahorran los demás comentarios y solo comparten, si acaso, sus «inventos» para sortear cada limitación o carencia. Pero toda creatividad tiene un límite y toda resistencia, aunque permanezca, merma. Principalmente porque esos obstáculos que dificultan la vida del cubano común duran ya demasiados años, y el cuerpo es humano, y se resiente por más que el espíritu siga inalterable.
Desde Matanzas la colega Yirmara Torres sostiene que allí se acabaron los apagones y también los alumbrones. Para que existan, explica, debe de haber servicio eléctrico y lo que hay, dice, no clasifica como tal. De hastío respecto a déficits en capacidades de generación, falta de combustible para esos fines, termoeléctricas y sus roturas habla la colega. También, de falta de energía no solo en el plano de protones y electrones.
No por duros los tiempos deja de haber chistes en redes sociales. En medio del peor apagón uno a veces suelta la carcajada. Proliferan también, dicho sea de paso, las falsas noticias que intentan avivar el pesimismo y la desesperanza. Los ataques, las tergiversaciones, las bajezas.
Adaptados a los equipos eléctricos en la cocina y carentes ─no por su voluntad─ del servicio de gas licuado del petróleo (GLP), algunos solo pueden, si la economía y las condiciones hogareñas lo permiten, acudir al carbón. Un saco puede costar, por estos días, entre 1000 y 1500 pesos.
Sin embargo, no es el medio de elaboración el único problema para la alimentación diaria, necesidad vital de cualquier ser viviente. Está, antes que eso, la indisponibilidad misma del alimento, en tiempos cuando comprar tan solo uno de los renglones necesarios para varios días puede significar desembolsar íntegramente la entrada monetaria del mes.
La inflación tomó las riendas. Vendutas de cualquier índole se asentaron en casi cada domicilio donde, sin la menor noción de mercadotecnia, la gente vende o revende para ganar lo necesario y seguir sobreviviendo.
No todo lo que se vende o compra es de primera necesidad. Hay quien, a precios elevados, adquiere artículos que a la luz de los tiempos actuales para muchos clasifican como nimiedades. Hay quienes tienen en abundancia. Por otro lado, es estimable la cifra de ciudadanos en condiciones de invertir solo, y si acaso, en alimentos. También, de esos a quienes la cuenta no les da ni siquiera para agenciarse los fármacos que requieren, porque los medicamentos se convirtieron en quimera y aparecen casi exclusivamente en ventas callejeras, con precios de espanto.
Si el poeta Manuel González Busto reescribiera sus Cartas a Giselle tendría metáforas y alegorías nuevas. Diría a su musa, por ejemplo, que el café es una evocación en el paladar de muchos. Que el azúcar quimera frecuente en manos de los dioses, los huevos cisnes de oro en vuelo fugaz, la luz un cometa que ojalá asome el próximo siglo.
Ángel Martínez Niubó, escritor de Fomento, encuentra inspiración en lo cotidiano, en personas comunes y la grandeza de su espíritu, en el altruismo de sus actos, más notorio por la crudeza de la vida que se lleva; en la esperanza.
Como es menester casi por salud emocional entretenerse en algo que a la vez distraiga, por redes sociales de internet circulan igualmente reseñas, memes y predicciones sobre la telenovela de turno. En Sábados de gloria, la que acaba de concluir, ni apagones ni carencias ocuparon espacio. Pero cada telenovela cumple su función y despereza neuronas. Las turcas, por ejemplo, cuentan con altísima demanda y son escapatoria para una amplia teleaudiencia.
En medio de todo esto la gente viene y va, sorteando el sol que raja piedras y los escollos del transporte, que aquí ha tenido su mejoría reciente con nuevos vehículos ecológicos. La gente se ayuda porque no todos los valores se han perdido, aunque a veces la decencia se va de paseo. Sucede cuando, por ejemplo, afloran obscenidades perfectamente prescindibles en plataformas digitales como Facebook. Lo burdo, lo grosero, genera likes, algo muy de moda y al parecer muy importante en estos tiempos.
Se ha entronizado, de igual modo, una marcada tendencia plañidera, como si de quienes leen dependiera la solución de cada calamidad expuesta. Nunca antes se expusieron más lamentos en público, no siempre correspondientes con las mayores necesidades. Hay quienes sienten vergüenza ajena por esa especie de oportunismo cibernético de sus coterráneos.
Así van las cosas en este 2025 por Cuba y Sancti Spíritus, con otros matices también, menos oscuros, como esas escuelas que no se cierran nunca o esos hospitales donde, enfrentando carencias de diversa índole, no dejan de atender a los enfermos. Pero de esos sucesos, donde hay mucho admirable y también impactante, se escribe casi a diario.
Tuve un director en Escambray amigo de espolear el espíritu, de compulsar la escritura sobre cualquier tema, por difícil que fuera; de buscar lo que interesa al lector hasta cuando las fuentes oficiales no se abren a lo que el reportero indaga. El argumento, o uno de ellos: que de cada época debe quedar registro en la prensa nuestra.
Siguiendo su mandato escribo. Con suerte, dentro de mucho tiempo los que vendrán y abran estas páginas sentirán, junto a la resistencia de estos años, la oscuridad, la escasez de todo o casi todo y el olor a carbón.
Como han cambiado los tiempos, muestra que los problemas cotidianos ya se dicen sin pelos en la lengua y que lógicamente demorarán tiempo en resolverse.
Delia, descubrí recientemente sus artículos y me han encantado. Finalmente, alguien escribe medio nacional «haciendo tierra». Ojalá que nadie le escarbe el piso. Leí su última entrevista dónde los representantes de la eléctrica arguyeron que Santi Spiritus era una zona de transferencia oriente – occidente y por los sostenidos y gruesos apagones. ¿A quién transferirá Granma? Porque en la «emulación oscura» no creo que nos aventajen, en la capital provincial tuvimos, en los últimos días, varios circuitos superaron las 24 horas y luego se han mantenido coqueteando con las 20, más o menos; pero en los municipios es algo habitual. Acá, hace un tiempo, fueron más sinceros, se dijo «que Granma era una provincia residencial», un fatalismo geográfico – social. Luego, se aparecen altas autoridades del país para prometer ligera mejoría en julio!! Y empieza el mes en terapia intensiva… creo que debían ser más cautos nuestros dirigentes para hacer promesas, esos fallos afectan el prestigio y el capital político, porque no es el primer 11 en el tiro al blanco, recordemos, por ejemplo, «que el 2024 tenía que ser mejor». Será mejor hablar claro para poder salir del bache.
Muchas gracias por sus elogios. Solo que esa entrevista de la que habla sobre los apagones y sus pronósticos no la escribí yo. También es del corte de periodismo de denuncia, pero la escribió otra colega.
Por demás, compayes espirituanos, la historia ha demostrado que el exceso de intervencionismo estatal en la economía y se protección conduce a un atolladero. Si, esa misma protección que se añora por la falta de Fidel. Sucedió en la Europa del este, en la España de Franco, en China, donde quiera que se implantó, se llegó a una deuda elevada y las reservas internacionales depauperadas, sin distinción, más otros males; la bolsa tiene que estar abultada para sostener la utopía. De otro modo, nos vamos a a quiebra. Hay mucha tela por dónde cortar, pero a estás alturas, la gran e innegable obra de la revolución es una trampa, un grillete en sus piernas debilitadas, porque apostamos muy alto. No se trata de exigir, hay que mantener. Salir del hueco no será fácil, pero es preciso, con inteligencia, sin reticencias ante los cambios necesarios y mucho más agilidad para acometerlos y mucho trabajo y dolor, pero un dolor fertil, no árido, porque huyendo de las políticas de choque hemos llegado a vivir en shock cada día. Hace poco pasaron en los cintillos de la Revista matutina una noticia de Viet Nam: 70 de sus empresas están entre las más grandes de Asia. Así, sin sonrojarse, sin inmutarse, se dió esa información que aporta conclusiones precisas: Viet Nam emprendió las reformas hace mucho tiempo, cuando se decía aquí «que no eran aplicables en Cuba». Y ahora es una economía pujante. Sabemos que tenemos un escollo serio más al norte, pero compayes, ante la evidencia hasta el dogma se derrite y se remodela.
«? Se habrá también escondido la Censura al final del túnel?
Hay que aplicar otros métodos y no los actuales, hay que utilizar los que den resultados positivos. Ejemplo: Japón , que en 1945 quedó destruido y hoy es un pais de primerisimo mundo y como lo hizo, utilizando la inversión extranjera, privatizando empresas y recaudando el 40% de todas estas empresas del país y extranjeras y reutilizando esta recaudación en el desarrollo del país. Los métodos cubanos no han dado resultados, hay que «CAMBIAR LO QUE DEBA SER CAMBIADO»
Así, como esta periodista, como ESCAMBRAY, es que se hace Revolución. Los demás medios están demás. Me quito el sombrero ante ustedes.
El país no necesita «un trozo de carne» (como dice la canción «Carne» de Buena Fe), necesita acción, soluciones, alternativas, creatividad, y siempre revisar en qué beneficia al Pueblo cada medida propuesta, como hacía Fidel. Si no beneficiaba al Pueblo, no se aprobaba.
Nuestro mayor problema y sin solución es que Fidel ya no está para proteger al pueblo y a los más necesitados.
Tantas verdades que se dicen y escriben en diferentes medios.
Tantos ejemplos o sugerencias para poner en práctica para mejorar la situación general del país…
El pueblo es la mayoría, al pueblo hay que escucharlo.
Los de a pie, los ancianos, niños, los jubilados, los enfermos… es deprimente como se está viviendo, si a esta situación se le puede llamar vida.
La Inflación no tiene capacidad para tomar las riendas por ella misma, la que entrega las riendas a la Inflación es la incapacidad productiva de un país como Cuba.
Hola. Me he asombrado hoy al ver este artículo. Últimamente pienso que la prensa nacional se encuentra desconectada de la realidad. El noticiero nacional de televisión no habla nada prácticamente de las carencias que vivimos, ni se encuentran este tipo de artículos en nuestra prensa Escrita. En los reportajes que se transmiten todo es bueno, muchas veces sensacionalista.
La vida se ha vuelto totalmente estresante. Yo tengo un bebé de 6 meses y cada día es un reto en medio de esta situación. Estar pendiente a que llegue la electricidad para hacer 1000 cosas a la vez con un niño en brazos a veces dando gritos se ha vuelto la normalidad. Los días son difíciles y las noches, mejor ni hablar de ellas… comida, medicamentos, agua, transporte, corriente, gas, todo conspira contra nuestra salud mental. Vivimos en tiempos en los que no se trabaja en unidades estatales, es extraño ver a algún trabajador después del medio día en su centro y si está, no está mentalmente pensando como arreglárselas luego. Hacer un trámite tarea de titanes.
Yo siempre he creído en esta Revolución, pero muchas cosas no andan bien y no me refiero al bloqueo.
Resistencia y creatividad vienen acompañadas de creer.
También creo como esta periodista que es mucho el tiempo que llevamos padeciendo, que el cuerpo humano se lo siente. En los barrios el nivel de descontento con la situación es grande. La gente se levanta estresada y se acuesta estresada y cada día que amanece pienso que éramos ricos en días anteriores.
Yo no veo la luz y me duele pensar que nos depara a los que nos quedamos.
Ésto me lo comenta Deep Seek por ejemplo:El gas licuado es el eslabón más visible de una cadena de fracasos: el bloqueo asfixia, pero la burocracia paraliza. Mientras EE.UU. mantiene sanciones que violan derechos humanos básicos, el gobierno cubano insiste en modelos centralizados obsoletos, sin auditorías transparentes o reformas de mercado que liberen fuerzas productivas locales. El resultado es un pueblo convertido en «ingeniero de su propia miseria», donde sobrevivir con carbón y lámparas recargables se vende como «resistencia», no como derrota civilizatoria . Cuba necesita un nuevo contrato social que priorice técnicos sobre ideólogos y ciudadanos sobre consignas.
Se está dando cierto pso por LA CENSURA a listar los Fenómenos , pero, no la Esencia que es la Incaacidad de nuestro Gobierno de dirigir la Economía cubana.
Quisiera ver esto en el noticiero de las 8
Como siempre tus escritos, espectaculares
. Sería bueno que este tipo de artículos se multiplique en el periodismo cubano. Ya estamos al límite y de mentiras estamos cansados.
Todo esto que Ud acaba de comentar se llama en una sola palabra «Desesperanza» provocado por un modelo agotado, fallido, fracasado que donde se aplicó a rajatabla arrojó los mismos resultados, la evidencia empírica y los ejemplos son tan contundentes que no dejan margen a la duda.
Estoy totalmente de acuerdo con usted, solo que las personas que deben tomar soluciones no están ni en lo más mínimos pasando por las vicisitudes que hoy está pasando nuestro pueblo, y seguimos aferrados a mentes cerradas que no quieren abrirse porque no lo sufren. Abrir nuestras mentes es pensar, en llegar a punto de equilibrio, es dar y recibir, eso no quiere decir claudicar.
y faltó el tarifazo de etecsa para acompañar el olor a carbón
LO DE ETECSA NO TIENE NOMBRE Y SE PERMITIO QUE SIGUIERA ADELANTE SIN TENER EN SU CUENTA LOS SALARIOS DE LA POBLACIÓN ,SI COMO ELLOS QUE DICEN ES POR LAS INVERSIONES NECESARIAS Y QUE TIENEN PERDIDAS ,DIGAME USTEDES SI LAS DEMAS EMPRESAS DE ESTE PAIS DECIDIERAN LO MISMO COMO SERIA EL CAOS GLOBAL DE TODOS LOS CUBANOS AUNQUE ESTEMOS SERCA EN ESTOS MOMENTOS
Mientras ETECSA no tenga competencia y sea la dueña absoluta, podrá seguir usando la necesidad de comunicación del pueblo aplicando precios ABUSIVOS y ESPECULATIVOS.
Si no se prohibiera la inversión extranjera y empresas foráneas pudieran prestar servicios en las comunicaciones tendríamos un mejor resultado para el pueblo y hasta por medio de impuestos el país tendría más ingresos en este sector .
Amigo mío, discúlpame, pero es lo q está sucediendo, las empresas incrementan sus ganancias, no con el incremento de la producción y variedad, solo con el incremento de los precios entre las entidades estatales, es decir, de producción estatal socialista, cumplen, incremento, pero con los porciento aplicado a cada entidad y estos a si vez a la venta a la población para poder cumplir los estandartes en los gobiernos municipales y pagar a sus trabajadores, quienes sufragan todo como un efecto domino, nosotros, el contribuyente, verdad? Ahora sí pueden publican mi comentario, lógico o no es lo q pienso sin ser economista ni tanque pensante como lo debiera tener nuestra máxima dirección, por favor, valoren los costos político y económico, gracias
ETECSA es una empresa que tiene que adquirir lo que da en servicio en moneda extranjera, a pesar de que da la opción en CUP pero todo lo que ofrece y vende viene de afuera y tiene que comprarlo en vista de que el acceso de los beneficios del pueblo se estaba haciendo cada vez más grande a los servicios en CUP necesita la moneda extranjera para sobrevivir, igual la corriente eléctrica todo lo que se compra para mantener o dar servicio se paga en moneda extranjera fuera del país por medio solo del estado que no tiene con la caída también del turismo como generar esos ingresos, la cuestión es que ahora se han permitido algunas libertades pero todo estaba en lo que él estado podía hacer y así no es ni en China que tiene un sistema al estilo socialista.
Con esa muela de usted se estan haciendo barbaridades llevando casi todo a incrementos de precios o «dolarizacion parcial» con esa misma justificación usted se imagina que todas las empresas por esa misma situación de adquirir la materia prima en dólares y vender en CUP quieran seguir el ejemplo de Etecsa esto sería un infierno. Los países adquieren sus materias primas en los mercados internacionales venden sus producciones en sus monedas nacionales si quieren dólares que busquen otra vía y no a costa del pueblo
EXCELENTE escrito de la ciudadanía de a pie, MAGNIFICA exposición del día a día del pueblo cubano, GRATIFICANTE leer una crónica como la escrita, FELICIDADES por escribir lo que muchos deseábamos leer.