La Edad de Oro cobró vida en las calles espirituanas (+ fotos)

Un enjambre de “Meñiques”, “Bebés”, “Nenés Traviesas” y otros tantos personajes de La Edad de Oro tomaron por «asalto» las calles de esta ciudad, en homenaje de infinito amor de los más pequeños a José Martí en el aniversario 164 de su natalicio

Keyla Travieso, de solo cuatro años, fue una de esos infantes espirituanos que demostraron cuánto de encanto y ternura guardan los corazones de “los que saben querer”; de ahí que en esta fecha especial la niña fuera vestida de Pilar, con su sombrero, aro, balde y paleta.
Con la ingenuidad que caracteriza a la llamada edad feliz, Keyla recitó los primeros versos de Los zapaticos de rosa, porque también quería demostrar que conoce quién es el Maestro y la razón de su vestido largo y blanco.
Soy una princesita, comentó la pequeña, quien llevaba en el balde una muñeca negra, un símbolo también de la virtud de aquellos que regalaron este sábado al Héroe Nacional todo tipo de iniciativas, como rosas blancas, poemas, consignas y banderas cubanas.
Los miles de pioneros, maestros y jóvenes espirituanos recorrieron este día el parque Serafín Sánchez y sus arterias aledañas con las doctrinas del Apóstol en el corazón, una gran fiesta dedicada al más universal de los cubanos para demostrar cuán vivo está su legado en toda la Isla.
Este desfile, donde la familia también se convierte en protagonista, sirve de excusa para volver a la fecunda obra de Martí y regresar, una vez más, a La Edad de Oro, ese texto imprescindible que por sus enseñanzas debiera encontrarse en todos los hogares.
Cargados de sueños y sonrisas, los “príncipes enanos” y los que se sumaron al desfile demostraron cuánto hay en cada cubano de patriotismo, hermandad y fe en el porvenir, el mayor tributo que le puede hacer la Mayor de las Antillas, este 28 de enero, al Héroe de Dos Ríos.