Escambray Periódico de Sancti Spíritus
Una queja bien justificada fue la que realizó mediante su misiva a Escambray Vladimi Ramírez Martínez, vecino de la calle Don Pedro León No. 209 A, en la ciudad de Sancti Spíritus. En la misma refería ser consumidor de la panadería del barrio de Jesús María y que, aunque se levanta muy temprano cada mañana para comprar el producto antes de que su hijo salga rumbo a la escuela, existen problemas con el uso del Plan Jaba que entorpecen el normal desempeño de la cola.
“Diariamente llegan personas que dicen poseer el sello de Plan Jaba, sin embargo, abusan de este beneficio, pues lo mismo se presenta un mensajero, que algunas personas con una libreta de Plan Jaba y muchas más que no lo son y se las aceptan por igual, aunque el resto de las personas en la cola protesten”, aclara el remitente.
Más adelante, Ramírez Martínez refiere que lo más lamentable es que son los dependientes los que deben poner orden en este caso y no lo hacen.
Escambray conversa con José Ramírez Aguiar, director de Comercio en el Grupo Empresarial del Comercio en Sancti Spíritus, quien hace referencia a la resolución emitida desde 1992 para beneficiar a las mujeres trabajadoras, la cual, aunque ha sufrido algunas modificaciones, se mantiene vigente.
Tal resolución sufrió modificaciones durante el X Congreso de la Federación de Mujeres Cubanas porque ya no estaba a tono con los cambios de la sociedad. Según lo acordado, podría beneficiar a mujeres u hombres trabajadores activos que vivan solos o que todos los integrantes de su núcleo familiar sean trabajadores, estudiantes o menores en edad no escolar; asimismo, a estudiantes en edad laboral que vivan solos o convivientes con personas con invalidez física total comprobada y también ancianos que vivan solos y posean algún tipo de invalidez o discapacidad.
Pero tal y como manifiesta el remitente de la carta, la mayor insatisfacción está en su uso, muchas veces indebido. Por ejemplo, la propia resolución alude que quienes poseen este beneficio deben mostrar la libreta al dependiente o a las personas de la cola que así lo soliciten y está establecido que compran dos con Plan Jaba y uno de la cola normal. Por otra parte, contempla que su uso será de lunes a domingo y se podrá efectuar más de una compra al día.
Igualmente, apunta que la venta solo se realizará a las personas cuya libreta esté acogida a este sistema y constituye responsabilidad de las administraciones y de los dependientes de cada unidad comercial el cumplimiento de lo dispuesto. En tanto se hará uso del mismo solo para adquirir los productos normados y controlados por la libreta, no así para los de venta liberada, excepto cuando coincida la venta de ambos.
Esperemos que las dudas de Vladimi queden esclarecidas y que en la panadería del barrio de Jesús María se acabe el dilema por el uso indebido del Plan Jaba.
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Escambray / ISSN 9664-1277
Recuerdo que en mi niñez y adolescencia ls beneficiados con le Plan Jaba -antes de irse a trabajar-, dejaban en la bodega o carnicería la libreta de abastecimiento con una lista de lo que querían comprar y -al regresar del trabajo-, recogían y pagaban lo comprado, pues durante el día los bodegueros preparaban envasaban, pesaban y alistaban la compra sin entorpecer el despacho a los consumidores no acogidos a ese Plan.
Aquí la compañera administradora de la tienda La Marinera manifiesta que ese no es un problema de ella, que ni ella ni los dependientes tienen que controlar nada referente al Plan Jaba, que eso lo tienen que resolver los que están en la cola.
¿Habrá leído la resolución?????
En Florida, de donde soy, eso del plan jaba y la norma son un asunto bastante peliagudo, que alcanza valores de huracan cuando se tratan o se discuten en una de las tantas colas de la comarca. ¿Un impedido físico parcial, digamos por presentar problemas de sordera o vision, puede tener ese derecho? Siendo numerosa la lista de impedidos físicos, de toda clase o índole, lamentable en todos los casos, no ignoro la inmediatez y el tino con que el país trata el asunto en términos de lejislacion y de normativas que, como dije, desconocen tanto el bodeguero como el usuario. Y es una pena, como consumidor y poseedor del derecho sufro y hasta me he visto protagonizando el debate, peregrino y foráneo, como de otro mundo, legulello, dice alguien. Precisamente, porque hay una falta de comprensión y desconocimiento enorme sobre esa normativa en Florida que motiva el espanto y hasta la carcajada pedagógica. Por tanto, sugiero que se coloque la resolución, una copia de ella, en cada bodega, visible al público. Que se le oriente al personal de comercio, a los empleados de bodega sobre todo atender y velar porque se cumpla lo establecido no solo como un mero deber, sino que lo entiendan como una obligación, cosa que aquí es problemico y te «acuchillan» cuando le pides a alguno que organice la cola. Ese es mi sugerencia… Muchas gracias
Saludos, el tema es bastante complicado, ningún dependiente quiere buscarse problema en ningún establecimiento del comercio es vender y ya, para nadie es un secreto que la mayoría de las personas mayores e impedidos físicos hacen los mandados de la casa, y hacen uso del Plan Java de la hija o la nuera que
son las trabajadoras , y núcleos con varias personas y el enfermo es quien hace los mandados, si uno se pone a tratar de poner el orden allí, eres el malo, cuando en realidad esto le toca al personal de la unidad de comercio, gracias
El artículo es bueno, pero la fecha del inicio del Plan Jana, es un tremendo error, cuando se coloca que el mismo se inició en el año de 1 9992. He vivido en SStus de 1974 hasta 1 979, y el Plan Jaba ya existia. Yo era casado con Carlota Guillot, excelente peruiodista de Escambray, y yo también fuy fundador y trabajé en el mismo……..