La activista sueca Greta Thunberg denunció en la madrugada de este lunes haber sido secuestrada en aguas internacionales por “autoridades de Israel o fuerzas que apoyan a Israel”. A través de un video, la joven pidió a sus amigos, familia y camaradas que presionen al gobierno de Suecia para lograr su liberación.
Previamente, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel confirmó que sus fuerzas tomaron el control del barco Madleen, de bandera británica, donde viajaban Thunberg y otros 11 activistas pro-Palestina. La embarcación se dirigía a la Franja de Gaza con ayuda humanitaria y buscaba concienciar sobre la situación en la zona.
En un comunicado, Israel se refirió al barco como el “yate selfi de las celebridades“ y anunció que era trasladado a sus costas, agregando que se espera que los pasajeros regresen a sus países de origen.
Además, la Cancillería israelí publicó un video en el que se ve a los activistas, asegurando que están “sanos y salvos» y que se les proporcionó sándwiches y agua. Las autoridades calificaron el incidente como una provocación mediática.
Según el gobierno israelí, Thunberg “está de buen humor”.
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